Cuidado del producto
Nuestros productos están creados a mano, uno a uno y con mucho amor, con materiales muy diversos: Lino, algodón, cerámica, conchas, cauri, cuero, plata de ley, piedras semipreciosas, perlas, zamak, plata de ley bañada en oro,.... En la descripción de cada artículo podrás conocer con qué materiales están elaborados cada uno de ellos.
Para que puedas lucirlos el mayor tiempo posible, te ofrecemos unas recomendaciones de cuidado, uso y limpieza teniendo en cuenta los diversos materiales con los que trabajamos.
CONSEJOS GENERALES:
Para guardar tus complementos, lo mejor es hacerlo en un lugar protegido de la luz y la humedad. Si puedes guardar cada pieza de forma separada en un saquito o bolsita mejor que mejor. Y recuerda dejar cerrados los pendientes, collares y pulseras, ya que abiertos se pueden estropear y enredar con facilidad.
Como práctica general, a excepción de la plata de ley, si mojas la mayoría de materiales como el algodón, el zamak, el cuero, el algodón, el lino, la cerámica pintada, la plata bañada en oro,... te arriesgas a que se vayan deteriorando paulatinamente. Evita que tus joyas entren el contacto con agua, jabón, lejía, cosméticos, perfumes.
En resumen, cuando ya te hayas duchado y arreglado del todo, es el momento de ponerte tus complementos. En el caso de los productos de plata de ley o con los complementos realizados con plata de ley, conchas, minerales e hilo sintético, su uso continuado no los deterioran como al resto de materiales, aunque también conviene darles un respiro de vez en cuando.
LIMPIEZA:
En ocasiones la plata de ley 925 puede sufrir pérdida de brillo o ennegrecerse. Esto normalmente es debido al contacto con algún producto químico, al sudor o al propio PH de la piel.
Para recuperar su brillo, tan solo debes frotarlas suavemente con una gamuza de microfibra específica para limpiar plata. Si necesitas una limpieza más profunda, bastará con usar un cepillo suave con un poco de agua tibia y jabón neutro.
Las joyas de plata de ley bañadas en oro solo deben lavarse suavemente con una gamuza de microfibra específica para limpiar plata, sin agua. Al llevar un baño ligero de oro, son susceptibles a perder el baño tan solo con el uso. Un cuidado exhaustivo siguiendo los consejos anteriores alarga la vida del baño, pero con el tiempo, éste va desapareciendo. En ese caso, se puede llevar a bañar de nuevo, o puedes ponértela más para que la plata de ley de la que está hecha la joya se deje ver.

